Fernando Velázquez, conocido por sus trabajos en El orfanato o Lo imposible, es el compositor de la película de aventuras Hércules, dirigida por Brett Ratner y con Dwayne Johnson, John Hurt, Ian McShane e Irina Shayk, y que se estrenará en España a principios de septiembre. Basada en la novela gráfica Hercules, The Thracian Wars (2008), la película narra las aventuras del semidiós atormentado hijo del rey Zeus. Hércules no es dios ni mortal, y esta condición no ha traído nada más que sufrimiento a su existencia. Después de muchs vicisitudes y la pérdida de su familia, decide darles la espalda a los dioses y encontrar recompensa en sangrientas escaramuzas. Durante el transcurso de sus aventuras algunas almas afines se le han unido, compartiendo su amor por el combate y la constante presencia de la muerte en sus vidas. No hacen preguntas, solo quieren saber cuánto les van a pagar por luchar. Ahora el rey de Tracia los ha contratado para entrenar a sus hombres y convertirlos en el mayor ejército de todos los tiempos. Fernando Velázquez empezó en la música en los conservatorios de su localidad natal, Getxo, para luego seguir en Bilbao y Vitoria. Su carrera como compositor de bandas sonoras se inició en 1999. Sus primeros trabajos fuera para el realizador Koldo Serra, para hacerlo después para J. A. Bayona en El hombre esponja o Nacho Vigalondo en en 7:35 de la mañana. En el año 2006 dio el salto a los largometrajes participando en El síndrome de Svensson, de Kepa Sojo, y Bosque de Sombras, de Koldo Serra. Al año siguiente, su trabajo en El orfanato le generó sus primeros reconocimientos. Puso también la música a Lope, del brasileño Andrucha Waddington, y a Los ojos de Julia, de Guillem Morales y producida por Guillermo del Toro. Después llegaría la banda sonora de Lo imposible y, más recientemente, de Mamá, Zipi y Zape y el club de la canica y Ocho apellidos vascos. Además de múltiples trabajos para la televisión, Velázquez ha dirigido a la Orquesta Sinfónica de Euskadi, al Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid, al London Metropolitan Orchestra, a la Sinfónica de Málaga y a la Sinfónica de la Radio de Budapest.