El Pictures at an exhibition de Modest Mussorgsky, La Valse de Ravel y Petruschka de Stravinsky: la pianista georgiana Khatia Buniatishvili reúne en su nuevo álbum, Kaleidoscope, una combinación única de tres obras maestras a través de su magistral interpretación. Se trata de un trabajo con piezas muy diferentes, pero con su propia identidad y colorido. Al tratarse de obras que solo tienen versión orquestal, la pianista ha sabido encontrar todos los matices en un solo instrumento, un desafío que afronta como la creación de un cuadro, en el que las piezas se entrelazan para adquirir el especial carácter que ella quiere enfatizar.

 

Kaleidoscope reúne música para ser vista y oída, y que brilla con otras formas de arte como la danza, los títeres o la pintura. Sus colores resplandecen en todas estas piezas que se ensamblan como un caleidoscopio. Kaleidoscope es también el nombre de la canción del nuevo álbum de Coldplay, A Head full of Dreams, que se lanzó el 4 de diciembre, y en la que la gran pianista georgiana colabora.

 

Nacida el 21 de junio de 1987 en Tbilisi, el extraordinario talento de Khatia Buniathisvili se le viene reconociendo desde hace ya algunos años. A los seis años debutó como solista con una orquesta, y fue invitada posteriormente por artistas de todo el mundo. Pero Khatia prefirió no ser considerada como una niña prodigio. Por encima de todo, ella se mira en pianistas de generaciones anteriores como Rachmaninoff, Richter y Gould. Pero su pianista favorita es Martha Argerich, de la que admira su singularidad y a la que, en consecuencia, trata de no emular.

 

Buniatishvili ha sido invitado a actuar con muchas orquestas de renombre como la Orquesta de París dirigida por Paavo Järvi, la Filarmónica de Los Ángeles, la Orquesta Sinfónica de Viena, la Orquesta Nacional de Francia, bajo la batuta de Daniele Gatti, y la Orquesta Filarmónica de Londres. También se la puede escuchar en las actuaciones de música de cámara en el trío con Gidon Kremer, con Renaud Capuçon o también con su hermana Gvantsa.

 

En 2010, la multipremiada pianista recibió el Borletti-Buitoni Trust Award y fue incluida en el proyecto de la BBC New Generation Artists. El Vienna Musikverein y Konzerthaus la nominaron como Rising Star para la temporada 2011-12. En 2012 fue galardonada como Mejor Artista Revelación del Año en los premios Echo Klassik. Kaleidoscope es su cuarto álbum en Sony Classical, después de su debut en 2011 con su recital Liszt, que recibió un reconocimiento internacional.

 

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