Los Rebeldes la gran banda icono del rock & roll español durante 4 décadas, son un retrato de la escena musical española desde el cambio generacional de mitad de los 70 con la llegada del punk y el neorockabilly hasta la actualidad, siendo un ejemplo de longevidad musical. Son 40 años los que se cumplen este 2019 del nacimiento del grupo barcelonés liderado por Carlos Segarra, cuatro décadas de rock & roll, pero sobre todo de buenas canciones, tan buenas que son ya auténticos himnos para varias generaciones. Una efeméride así merecía una gran celebración.

El 15 de noviembre, Los Rebeldes estrenan Corazón de Rock and Roll, un proyecto conmemorativo de su 40 aniversario con vocación de bucear en sus archivos más íntimos para encontrar perlas de una carrera extraordinaria. Porque Corazón de Rock and Roll es un doble CD con una selección de sus mejores clásicos aderezados con unos cuantos inéditos, como Tequila, Great balls of fire y Ardiente amor, pero es también una caja con seis de sus álbumes más representativos, a los que se le añade un séptimo con Perdidos en el estudio y Noches de acción, dos antologías de demos, versiones alternativas, ensayos y directos.

La caja conmemorativa recupera sus álbumes Rebeldes con causa (1986), Más allá del bien y del mal (1988), En cuerpo y alma (1990), Tiempos de Rocanrol (1991), La rosa y la cruz (1993) y Carne para tiburones (1997). O lo que es lo mismo, seis discos del período 86-97, sin duda el más fructífero de la banda barcelonesa. A eso se añade Perdidos en el estudio, compuesto por 21 inéditos rescatados por Jaime Stinus. Ahí aparecen demos de éxitos como No me gusta trabajar, Noche de acción o Colgados en la carretera. También hay tomas descartadas de Waiting for Valerie o Rock and Roll. Y ensayos básicos de Ardiente amor, Un español en Nueva York, Mía o Mediterráneo. Se completa el trabajo con Noches de acción, 13 directos grabados entre 1992 y 1995 con lo mejor de la banda barcelonesa: deMediterráneo a Mescalina, pasando por La rosa y la cruzEres especialBajo la luz de la luna o Vestida de azul, pero también con versiones de clásicos del rock como Roadhouse bluesAll shook upStand by me o Great balls of fire.

Para acompañar tan selecto contenido, la caja incluye un libreto con una buena cantidad de fotografías, las letras de todos los temas, las portadas y un texto escrito por Segarra para la ocasión:

“Todos nuestros discos son una fotografía personal y musical de cómo nos sentimos en esos momentos, y, sin quererlo, siendo testigos y actores a la vez de los cambios vivenciales, políticos y musicales de un país que pasó de la (casi) nada al (casi) todo, con lo bueno y lo malo que ello acarrea a una nación adolescente”, escribe el líder rebelde.

Porque, en efecto, España transitó de la casi nada a la casi todo en aquellos años, y en lo musical, en esa transición fueron mucho más que testigos: desempeñaron un papel fundamental. 

Relata también el compositor y guitarrista que, “si los éxitos de Los Rebeldes se sucedieron, se debió en parte al talento y en parte al orgullo y empatía de un par de generaciones, que se identificaron no solo con su música, sino también con unas letras que no eran tan inocentes como algunos presumían”. Y tanto que no lo eran. “Hemos perdido todos algo por el camino, seguro que sí… Pero no podrán romper nuestro Corazón de Rock and Roll”, concluye Segarra, en referencia a la canción del álbum Más allá del bien y del mal que da título a la caja, y en referencia también a la actitud que les ha hecho formidables. 

Es su forma de conmemorar aquel acontecimiento de 1979, cuando Carlos fundaba Los Rebeldes. Era, pese a su juventud, un habitual de la escena musical barcelonesa, en la que se había hecho popular con sus versiones de Chuck Berry, Creedence Clearwater Revival, The Beatles, Bob Dylan y sobre todo, Eddie Cochran, a menudo junto a su amigo y “manager” Loquillo.

Al año siguiente grabarían su primer álbum, Cerveza, chicas y… Rockabilly!, que saldría publicado en 1981. Era el inicio de algo muy grande, algo que sigue vivo 40 años después, como lo demuestran las decenas de conciertos que siguen ofreciendo cuatro décadas más tarde.

… Son los latidos de todos aquellos que por mucho tiempo que pase siguen teniendo un auténtico corazón de rock and roll.

Los Rebeldes: cuatro décadas de rock & roll  en un doble CD y una caja con sus mejores álbumes e inéditos

Discos de estudio de la caja:

1986: Rebeldes con causa 

1988: Más allá del bien y del mal 

1990: En cuerpo y alma 

1991: Tiempos de Rocanrol 

1993: La rosa y la cruz 

1997: Carne para tiburones 

Perdidos en el estudio/Noches de acción (Inéditos)